
ALIMENTOS PROHIBIDOS
QUÉ ALIMENTOS ESTÁN PROHIBIDOS PARA NUESTROS PERROS (parte 2)
ALGUNOS ALIMENTOS PROHIBIDOS (continuación):
En el siguiente link, podéis acceder a la parte 1: ALIMENTOS PROHIBIDOS PARA PERROS – INFORMACIÓN (lacuevadelchihuahua.es)
CAFEÍNA, ALCOHOL Y OTROS ESTIMULANTES
Bajo ningún concepto deben tomar este tipo de bebidas ni otras sustancias estimulantes como bebidas energéticas o refrescos, son alimentos prohibidos para los perros.
Nuestro perro puede consumirlo por accidente, en ese caso se debe acudir de inmediato a un centro veterinario.
CEBOLLAS
Las cebollas están totalmente prohibidas para los perros, ya que cuentan con una sustancia llamada Tiosulfato capaz de causar anemia, pues el consumo de estas provoca el deterioro de los glóbulos rojos de la sangre.
DULCES Y AZÚCAR
Todos los dulces se pueden considerar alimentos prohibidos para los perros. El azúcar es un alimento que se debe evitar puesto que puede causar obesidad y en algunos casos diabetes.
Mucho cuidado con la fruta, ya que tiene un alto contenido de azúcares. No pasa nada por unos bocaditos de manzana o de plátano de vez en cuando, pero no debemos incorporarlo de forma habitual en su dieta. Además, en cuanto a las manzanas, melocotones y albaricoques, la fruta en sí misma no resulta perjudicial pero sus semillas, huesos y corazones cuentan con pequeñas cantidades de cianuro. Para los humanos es inocuo, pero los perros no pueden procesarlo.
SAL
Muchas personas que elaboran dietas caseras para perros utilizan la sal como un condimento más, no obstante, un elevado consumo de ella puede conllevar la deshidratación del perro, agravar patologías cardíacas y renales o provocar una intoxicación. Los síntomas de una intoxicación por sal serían vómitos, hemorragia interna, descoordinación, diarrea, ganas de beber y orinar constantes, convulsiones y shock.
LOS CÍTRICOS

Los cítricos no son buenos para los peludines, pues su ingesta puede provocar alergias. Además, el exceso de acidez puede causarles trastornos gastrointestinales.
LOS HUESOS Y LAS ESPINAS
Los huesos y espinas de pequeño tamaño como los del pollo o el pescado resultan muy peligrosos. Pueden causar asfixia o atascarse en la garganta. Si le das algún hueso que sea grande y sin cocinar (se astillan con más facilidad).
Los huesos cocidos tampoco deben ofrecerse a los perros, ya que pueden provocar la rotura de los dientes. También se astillan con facilidad, por lo que podríamos ocasionar una obstrucción de la tráquea, lesiones y perforaciones, desgarro y muchas otras lesiones internas.
Si deseas más información sobre el peligro de los huesos en la dieta canina, pincha en siguiente link: 🍖 Los huesos en la dieta barf del perro son buenos o peligrosos? 😋 – YouTube
EL HÍGADO
No resulta muy recomendable el hígado, puesto que contiene una gran cantidad de vitamina A que los perros no asimilan de forma natural. En pequeñas porciones y de forma ocasional no es peligroso. De hecho, se usa en dietas de comida natural como BARF, pero siempre mejor cocinado que crudo.
MASAS CON LEVADURA
Ya sea por la ingestión de masa de pan sin cocer o directamente de levadura, podemos provocar una intoxicación en nuestro perro. Los síntomas más frecuentes son la aparición de gases, vómitos, diarrea, malestar y letargo.
Su nivel de toxicidad varía de leve a grave, dependiendo de la cantidad ingerida, ya que en los casos más severos puede causar hipotermia, hipotensión, hipoglucemia y hasta un colapso.
PICANTE
El picante no es mortal, pero puede provocar diarrea y malestar, por lo que debe evitarse en la dieta de nuestro peludín.
CONCLUSIÓN
Éstos son sólo algunos de los alimentos tóxicos o poco recomendables para nuestros peludines, pero sí son los más habituales.
Aunque algunas veces se nos parta el corazón cuando estamos comiendo algo y nos mira con ojitos tiernos, debemos permanecer firmes y no darle si es algunos de los alimentos perjudiciales para él. Siempre tenemos que evitar darles esos alimentos dañinos por su bien, para mantenerle sano.
A veces es inevitable, que por accidente consuma alguno de ellos. Entonces debemos acudir a nuestro veterinario de confianza lo antes posible para evitar que la intoxicación pueda resultar fatal.